La indigencia también es cosa de cachorros: la miseria, la suciedad, el desamparo, la pérdida de razón, el síndrome de Diógenes, la locura y -claro- un dueño hijo de mil putas. Hay más de uno que piensa que este es Cachuchín después de una vida de fama, luces, autógrafos y excesos.
No sé con exactitud lo que pretende ser este blog, pero creo que me aproximo más a lo que ciertamente NO es: ARTE, EDUCACIÓN, HUMOR Y METAFÍSICA. Sin embargo, hay otras certezas de tipo más bien técnico: Todas las fotos que vas a ver han sido tomadas con una cámara de celular de 2.0 mega pixeles; no he retocado ninguna de ellas; he tratado de no forzar las capturas, intentando –siempre- conservar su naturalidad y espontaneidad.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario